El cajón superior, realizado en madera de fresno olivo, recoge los utensilios de uso más frecuente en la cocina. Al prescindir de laterales duplicados y aprovechar el fondo como base para los accesorios, ofrece más capacidad y resulta más ligero.
Los accesorios de interior complementan los cajones, aportando orden y funcionalidad: mientras los extraíbles facilitan la limpieza del cajón, otros como el cuchillero o el especiero son intercambiables. De esta forma, pueden adaptarse a las preferencias de las personas usuarias.
Los cajones dobles permiten clasificar alimentos, vajilla y elementos voluminosos como ollas o sartenes. Sus laterales comparten color con el cuerpo del mueble, conformando un conjunto estéticamente uniforme.
El mueble portafregadero reúne, en un espacio reducido, cubos de reciclaje y un cajón interior para guardar utensilios de limpieza.